¿SERÁ MEJOR OLVIDARSE DE LA TRAMA ORIGINAL?
Mientras Liandro se encuentra en la capital para su nombramiento como duque, Evelina se enfrenta a un nuevo problema: por el bien de Liandro y de la casa Bellaviti ¡debe marcharse!
Pero Liandro acaba dando con ella y Evelina lo rechaza en un intento de asegurar la felicidad del nuevo duque. Tres años después, una serie de invitados inesperados aparecen en la mansión sureña donde trabaja nuestra protagonista. Uno de ellos es Diego Cresenzo, el príncipe heredero. ¿Quién será el otro?